viernes, 25 de julio de 2008

Ambiente escolar

2008-07-27
Editorial
Ambiente escolar

El año lectivo que discurre resulta en extremo accidentado, por las desgracias que se ciernen sobre la población escolar. Escuelas contaminadas con la fibra de vidrio, planteles rancho, y foco de contagio de la meningitis, son hechos que han creado un clima caótico en el sistema.

Además de lo anterior, la suma de las desavenencias entre docentes y autoridades, y pugnas entre los acudientes y los maestros, tampoco ayuda a establecer un ambiente sano en el campo de la educación. La situación, más que quejas y protestas, amerita que se haga un esfuerzo para deponer intereses políticos y sectarios, cooperar en la búsqueda de la solución, y anteponer el bienestar de los alumnos a la ganancia o pérdida de espacio e influencia del resto de los involucrados en la actividad educativa.

Se hace necesario reflexionar profundamente sobre cada aspecto, para tratarlo conforme merece. Si la contaminación con la fibra de vidrio es producto de un mal manejo en la remoción de los materiales, que se reclame a los responsables su parte. Si la política de eliminar las escuelas rancho pretende dotar de un espacio digno a los educandos, bien puede sacrificarse por el momento el edificio ideal por otro económico, funcional, seguro y rápido de construir. Y si el contagio de la meningitis es producto de focos virales en vecindarios y entornos allende la escuela, que se atiendan esas áreas y se deje de achacar al sistema escolar la causa principal de la propagación de la enfermedad.

Nos merecemos un ambiente escolar más digno, en todo sentido, y menos conflictivo y traumático. Al fin y al cabo estamos conectados a él, de una u otra forma, y sus deficiencias y dolencias a todos nos alcanza, ya sea en lo inmediato o en lo venidero.

Luis Alberto Díaz
Director de Panorama Católico
diazlink@primada.org

Ir a Panorama Católico Edición Digital

No hay comentarios: