2009-11-01
Editorial
Tres fiestas importantes
El ser humano tiene tres cosas que marcan su existencia, y a las que están conectadas todas las acciones de su vida. Ellas son Dios, la muerte, y la nación a la que pertenece. La fe y la existencia de Dios siempre le traerá conflicto interno, la muerte le preocupará y le causará temor, y por su pueblo y su nación dedicará pensamiento, esfuerzo y afecto.
Los panameños celebramos en estos tres días, un trío de fechas importantes: La Solemnidad de Todos los Santos, la conmemoración de los Fieles Difuntos, y el 3 de Noviembre. Cada una nos une a Dios, a la memoria de los seres queridos fallecidos, y a la Patria. En esencia, es el trípode que sostiene nuestra vida humana y nuestra condición de hombre, en tanto especie.
Sin embargo, el mundo actual intenta desarraigarnos del sentido de Dios y de la Nación. Se ataca a la Santa Madre Iglesia, para obligarnos a negar a Dios, y se ataca a la madre Patria, para arrancarnos el civismo y lo autóctono, reemplazándolo por una cultura masificante que nos deja sin raíces ni razón de ser como pueblo y nación.
Ante tal atentado, los creyentes y patriotas debemos afrontar el reto que se nos plantea en lo existencial, tanto en nuestra dimensión de hijos de Dios como en el plano de nuestra vocación histórica como nación. Y son estos días, precisamente, el escenario propicio para recordar y enseñar a los más jóvenes el sentido profundo que tiene nuestra pertenencia al Pueblo de Dios, la memoria de los mayores que nos transmitieron la fe y construyeron la patria, y la necesidad de un patriotismo auténtico, en su perspectiva cívica y su ejercicio práctico.
Luis Alberto Díaz
Director de Panorama Católico
diazlink@primada.org
Ir a Panorama Católico Edición Digital
Editorial
Tres fiestas importantes
El ser humano tiene tres cosas que marcan su existencia, y a las que están conectadas todas las acciones de su vida. Ellas son Dios, la muerte, y la nación a la que pertenece. La fe y la existencia de Dios siempre le traerá conflicto interno, la muerte le preocupará y le causará temor, y por su pueblo y su nación dedicará pensamiento, esfuerzo y afecto.
Los panameños celebramos en estos tres días, un trío de fechas importantes: La Solemnidad de Todos los Santos, la conmemoración de los Fieles Difuntos, y el 3 de Noviembre. Cada una nos une a Dios, a la memoria de los seres queridos fallecidos, y a la Patria. En esencia, es el trípode que sostiene nuestra vida humana y nuestra condición de hombre, en tanto especie.
Sin embargo, el mundo actual intenta desarraigarnos del sentido de Dios y de la Nación. Se ataca a la Santa Madre Iglesia, para obligarnos a negar a Dios, y se ataca a la madre Patria, para arrancarnos el civismo y lo autóctono, reemplazándolo por una cultura masificante que nos deja sin raíces ni razón de ser como pueblo y nación.
Ante tal atentado, los creyentes y patriotas debemos afrontar el reto que se nos plantea en lo existencial, tanto en nuestra dimensión de hijos de Dios como en el plano de nuestra vocación histórica como nación. Y son estos días, precisamente, el escenario propicio para recordar y enseñar a los más jóvenes el sentido profundo que tiene nuestra pertenencia al Pueblo de Dios, la memoria de los mayores que nos transmitieron la fe y construyeron la patria, y la necesidad de un patriotismo auténtico, en su perspectiva cívica y su ejercicio práctico.
Luis Alberto Díaz
Director de Panorama Católico
diazlink@primada.org
Ir a Panorama Católico Edición Digital
No hay comentarios:
Publicar un comentario